Lo reconozco, siento muy poca simpatía hacia la marca de la manzanita. No es que el diseño de los productos de Apple me deje indiferente, o que no valore su sistema operativo o su apuesta por la innovación. El problema que le veo a la compañía son sus numerosos puntos oscuros, por mucho que sus productos sean blancos. Uno de esos aspectos negativos es, sin duda, el estudiado plan con el que sacan a la venta nuevos productos y retiran los "