Como desarrolladores, a menudo nos encontramos realizando tareas repetitivas bastante parecidas (incluso a veces idénticas) a otras que hemos realizado anteriormente. En este post explicaré cómo mantener una biblioteca con control de versiones para poder encontrar fácilmente, reutilizar y compartir fragmentos de código con todo el mundo (o con unas personas determinadas) sin alterar demasiado el flujo de trabajo habitual.
Dependiendo de su complejidad, las buenas prácticas de Drupal aconsejan utilizar features, módulos personalizados o incluso perfiles de instalación para no repetirnos innecesariamente y ahorrar mucho tiempo y minimizar errores.